lunes, 3 de noviembre de 2008


Una vez me dijeron que en mi rostro figuraba tristeza, me preguntaron el clásico:"estás bien? te veo triste" yo sólo sonreí y preferí ausentar respuestas...No sé si fue suerte o no, el que el casi inquisidor decidiera consultar de otros temas a quien se hallaba a mi lado. Sus palabras si bien me causaron algo de sorpresa, hicieron que me sintiera triste, y de pronto intentara enmascarar las huellas de melancolía que figuraban en mí. Porque no negaré que en ese momento sus observaciones no fueron equivocadas. La lectura de mis propias palabras de despedida hace muchos años atrás, minutos antes, hicieron que me pusiera triste. Me recordó que las despedidas duelen. Y bien, a que tanto rollo de lo que me dijeron o dejaron de decir, pues a las mascaras que a veces nos ponemos para disimular las cosas, para evitar el daño dizque a los demás, cuando en verdad nos lo hacemos nosotros mismos, el creer que hacemos bien cuando estamos mal. Yo soy de las personas que se encierran en si mismo, demasiado, es bien extraño que logre salir de mi lobredad, lo malo es que cuando lo hago no encuentro a nadie a mi lado, o creen que soy yo la que no quiero ver??...

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