...Recuérdame...recuerda que te extraño, recuerda a quién jamás te va a perder...
En realidad esta canción no sabía que existía hasta que por ares del destino me enteré de su existencia. Es linda, verdad?... Esta canción me habla de ese amor que no se olvida, de ese que se mantiene a pesar de todo, ese amor que se encuentra solo lleno de recuerdos...y que clama por lo menos encontrarse en aquel minuto en el que los recuerdos se hacen presentes, en los bonitos, en los de la añoranza...sabiéndose así que fue amada, querida, extrañada...permitiéndole, tal vez, la esperanza de creer que esta existe y volverse a ver más allá de un recuerdo...
Una canción que habla de aquellos amores de verano...esos en los que se juran amor para siempre, en los que se roban besos sin pensar...esos en los que cada momento es vivido como únicos, en los que la razón se vuelve ciega como el corazón...en los que solo se vive en libertad...
Vale, otra canción de la famosa Italiana...Aquí recordando mi adolescencia.
Y he aquí nuevamente la canción: Mi rubi l'anima de la Italiana Laura Pausini. Hace años había colocado el video original de esta canción, y esta vez la vuelvo a colocar pero subtitulada al español. Sé que la belleza de la letra como está, es suficiente para sentir que es hermosa y especial.
Y no hay que ser fanáticos de ella para admirar sus canciones, solo basta el sentimiento y ganas de detenerse un momento para escuchar una melodía acompañada de una voz cantando lo que sale del alma. No lo creen?...Yo no me considero fanática de ningún artista, lo único que sí puedo decir es que, me gustan las letras de sus canciones, principalmente las que me hacen sentir y que son capaces de llegarme al alma, emocionándome al punto de querer repetirla, una y otra vez sin necesidad de cansarme. Sí ello me hace fanática de uno u otro cantante, pues aceptaré su opinión...más me es suficiente saber lo que es para mí.
Y como esta canción me retrae a ese espacio personal en el que puedo encontrar a mi alma y corazón, lo repetiré hasta que me canse y sencillamente en otro momento me dé por quererla escuchar otra vez.
Y quién no ha escuchado alguna vez a Nino Bravo. Un cantante que revolucionó la música romántica con su peculiar estilo y fuerza de voz.
La primera vez que decidí sentarme a escucharlo fue en mi edad adolescente, cuando una amiga dijo que su cantante favorito era este español. Y para entender aquel gusto lo busqué entre todas las frecuencias de radio hasta que alguna pase una canción del cantante (en ese tiempo no sabía del Internet). Y lo encontré.
No recuerdo exactamente cuál fue la primera canción que supe le pertenecía.
Sin embargo, la que siempre recuerdo, me hace subir todo el volumen y hasta llorar es "Noelia". Esa fuerza con la que grita el nombre de esa mujer tan esquiva que sin saberlo emocionó a un corazón.
No he conocido a ninguna persona con aquel nombre, pero si que conozco a muchas Noelias esquivas, que sin querer y proponérselos enamoraron a un corazón, y se marcharon sin querer escucharlo. Por miedo o sencillamente porque no lo querían así. Aún así, el amor se quedó y está en un corazón y lo único que puede es esperar que esa otra mitad, que al parecer no le pertenece en la realidad, sea muy feliz...así lo llegue a ser sin él.
...No te asustes mi amor si no estoy junto a ti pero crees sentir que acarician tus manos, si no estoy junto a ti pero crees sentir que alguien besa tus labios, y si escuchas mi voz, mis palabras de amor, no te asustes mi amor solo soy yo que en el viento te habla y acaricia tu corazón... yo que te quiero vida mía, te quiero noche y día, no he querido nunca así, te quiero con ternura, con miedo, con locura, solo vivo para ti...De por qué te quiero? no me pidas la razón, pues yo misma no me entiendo con mi propio corazón...ven a mí, abrázame porque te quiero, te quiero y hasta el fin te querré...Ven, que estoy llorando en la estación, el tren se va y ya no puedo retenerte junto a mí; mirando estoy el gran reloj, pues sólo queda un minuto nada más...ven y aunque este tren se marché para mí, antes de partir con tu recuerdo me iré y te dejaré un beso, un te quiero, una caricia y un adiós...Y cuando la lluvia deje de caer, sentada en la playa del olvido, formaré con la arena tu imagen serena, tu pelo con algas dibujaré, y te buscaré entre aquellas cartas amarillas: mil te quiero, mil caricias... así vuelva a la verdad, mis manos vacías te busquen, te llame y no escuches ya mi voz, simplemente porque ya encontré la puerta del amor...junto a ella te hallé y logré besarte, te siento dentro de mí, mi amor, mi Noelia.............. Yo no sé porque esta melodía me hace recordar y volver a soñar...
Una pareja de jóvenes tenía varios años de casados y nunca pudieron tener hijos. Para no sentirse solos, compraron un cachorro y lo amaron como si fuera su propio hijo. El cachorro creció hasta convertirse en un grande y hermoso perro; salvó en más de una ocasión a la pareja de ser atacada por ladrones. Siempre fue muy fiel, quería y defendía a sus dueños contra cualquier peligro.
Luego de siete años de tener al perro, la pareja logró tener el hijo tan ansiado. La pareja estaba muy contenta con su nuevo hijo y disminuyeron las atenciones que tenían con el perro. Este se sintió relegado y comenzó a sentir celos del bebé y ya no era el perro cariñoso y fiel que tuvieron durante siete años.
Un día la pareja dejo al bebé plácidamente durmiendo en la cuna y fueron a la terraza a preparar una carne asada. Cuál no fue su sorpresa cuando se dirigían al cuarto del bebé y ven al perro en el pasillo con la boca ensangrentada, moviéndoles la cola. El dueño del perro pensó lo peor, sacó un arma que llevaba y en el acto mató al perro. Corre al cuarto del bebe y encuentra una gran serpiente degollada. El dueño comienza a llorar y exclama: ¡HE MATADO A MI PERRO FIEL!
¿Cuántas veces hemos juzgado injustamente a las personas? Lo que es peor, las juzgamos y condenamos sin investigar a que se debe su comportamiento, cuáles son sus pensamientos y sentimientos. Muchos amigos fieles hemos "matado" por no aclarar una situación,muchas veces las cosas no son tan malas como parecen, sino todo lo contrario. La próxima vez que nos sintamos tentados a juzgar y condenar a alguien recordemos la historia del perro fiel.
Una historia que escuché hace mucho tiempo, y que al volverla a escuchar hoy, decidí compartirla con ustedes. No quiero repetir más reflexión de la que ya tiene, dejaré que el lector se cree la propia, según sus propias vivencias.
Soñé contigo, soñé que celabas mi presencia de otras que reclamaban mi atención. Tímidamente respondía a preguntas curiosas, mientras sentía tu mirada atenta a cada acto y palabrería de chicas que mostraban un interés poco usual hacía mí. Cuando estaba a punto de partir de tanta charla, me acerco a ti para despedirme con un simple beso en tu mejilla, pero sin permitírmelo, tomaste mi rostro entre tus manos y mirando fijamente mis ojos, tus labios tan rojos me dicen: no todas somos iguales...sonríes, besas el aire, dejas mi rostro, miras a las "intrusas" a mi lado y me dejas partir.
El sueño se desvaneció con mi despertar, sin dejar de quedarse impregnado en mi memoria. Sonreí a aquel sueño y me quedé pensando en aquellas palabras que mi subconsciente decidió poner en sus labios.
Hasta que volví a quedarme dormida y mis sueños volvieron a traerte a mí. Yo recibía una llamada, era tu voz diciéndome que habías llegado al país y estabas en el aeropuerto, inquieta te digo que llegaría en el promedio de una hora porque tendría que viajar hasta la capital.
Me apresuro en buscar la forma de llegar lo antes posible a ti, mientras pienso en lo que significaba tu presencia en un país distinto al tuyo, y que haría todo lo posible a que te quedaras para siempre conmigo. Cuando iba a tomar una especie de atajo al aeropuerto, alguien extraño me dice que no era la mejor forma y que había otra más adecuada y menos peligrosa. Mirando el acuático atajo que pretendía tomar y escuchaba sus palabras, tu nombre vino a mi mente y volví a despertar.
Sueños, como quisiera que esos sueños se hicieran verdad, como quisiera que en verdad tu corazón guardara amor hacia mí, como quisiera...hay tantas cosas que quisiera de ti, y me tengo que conformar con saber que aunque haya sido una vez, te tuve conmigo, te tuve frente a mí.